Cómo afrontar el absentismo escolar

2024

Written by Asim Qureshi
Por Asim Qureshi, CEO Jibble

Mi nombre es Asim Qureshi, soy el CEO de Jibble, anteriormente VP en Morgan Stanley. Soy licenciado en física y me apasiona la enseñanza. He enseñado matemáticas a niños desfavorecidos de barrios marginales y soy padre de 3 hijos educados en casa.

Mis hijos han conseguido logros académicos increíbles. Por ejemplo, mi hijo es la persona más joven en la historia en conseguir sobresaliente en los A-Levels británicos para jóvenes menores de 18 años, ¡y lo consiguió cuando tenía 10 años!

Creo firmemente que las escuelas y universidades deben mejorar el problema del absentismo escolar y aquí explico exactamente cómo…

El absentismo escolar puede ser un reto tanto para los educadores como para los directores de centros educativos. Ya se trate de un misterioso «día de baja por enfermedad» ocasional o de un absentismo escolar crónico, estas ausencias pueden interferir en el proceso de aprendizaje y obstaculizar el progreso académico.

En este artículo, profundizaremos en el problema del absentismo escolar y veremos algunas formas de resolverlo.

Nuestra misión es equiparte con una caja de herramientas estratégicas que te permitan conseguir un equilibrio entre la empatía y la responsabilidad.

Al fin y al cabo, fomentar un entorno de aprendizaje positivo no consiste sólo en aplicar normas estrictas de asistencia, sino en comprender los factores subyacentes que contribuyen al absentismo.

¿Cuáles son las principales causas del absentismo escolar?

El absentismo escolar es un problema complejo que puede repercutir negativamente en el rendimiento académico y en el bienestar general de los estudiantes.

Para abordar este reto con eficacia, es importante reconocer las causas que lo provocan:

  • Demasiadas distracciones online
  • Enfermedad
  • Bullying
  • Salud mental
  • Falta de motivación

Cómo enfrentar el absentismo escolar

El absentismo escolar plantea un desafío importante en el panorama educativo actual. A continuación desvelamos algunos secretos para hacer frente a este problema y mejorar la experiencia académica en general.

1. Crea un entorno favorable

Cuando nos enfrentamos al absentismo escolar, el ambiente que se crea en el aula está directamente relacionado con la asistencia.

Por tanto, es importante crear interacciones positivas y una atmósfera en la que los alumnos se sientan realmente apreciados y acogidos.

Como educador, eres el principal modelo positivo en la vida de un adolescente, por lo que es fundamental que trates a tus alumnos con la máxima dignidad y respeto.

Fomentar un ambiente de apoyo puede implicar promover la inclusividad, celebrar la diversidad y aceptar el caleidoscopio de diferentes orígenes y experiencias que cada estudiante aporta al aula.

Fomenta el diálogo abierto y crea un entorno en el que todos se sientan cómodos expresando sus ideas y opiniones.

Desde una postura de aceptación, estableceremos un espacio seguro donde los alumnos puedan ser libremente ellos mismos y mantengan el interés por el aprendizaje.

2. Conexión y comunicación

Para combatir el absentismo escolar es primordial establecer vínculos sólidos con los alumnos.

Dedica tiempo a conectar con ellos nivel personal y demuéstrales un interés genuino por sus vidas y experiencias. Propicia el diálogo abierto y un ambiente en el que los estudiantes se sientan cómodos compartiendo sus ideas y preocupaciones.

A medida que te relaciones con tus alumnos, escucha con atención lo que te cuentan mostrando empatía y comprensión.

Crear un fuerte vínculo entre profesor y alumno ayuda a crear un espacio de apoyo en el que los estudiantes se sientan realmente vistos, escuchados y motivados para asistir a sus clases.

Esta conexión se convierte en la base de una experiencia de aprendizaje positiva, en la que los estudiantes se sienten inspirados para participar activamente en su educación.

3. Implementa herramientas de control horario y de asistencia

Combatir del absentismo escolar utilizando la tecnología para controlar la asistencia y el tiempo puede ser tu arma secreta.

Lo más recomendable es utilizar un software de asistencia especializado en Educación, que puede ser utilizado tanto por los estudiantes como por el propio personal del centro.

Los alumnos pueden utilizar cómodamente sus dispositivos móviles para fichar y registrar su asistencia. Este método proporciona una fácil accesibilidad, eliminando la necesidad de que los educadores pasen lista siguiendo el modo tradicional en papel.

Los alumnos apreciarán la facilidad y eficacia del proceso, lo que automáticamente puede resultar un estímulo para acudir a clase.

Por otro lado, la información recopilada con este sistema, hará que puedas identificar patrones, tendencias y posibles señales de advertencia. Esto te permitirá intervenir a tiempo y proporcionar apoyo específico a los alumnos en situación de riesgo.

Los profesores y el equipo de profesionales del centro, también pueden beneficiarse del uso de este tipo de herramientas de seguimiento del tiempo. Aquí te dejo un artículo sobre las ventajas del control horario para los educadores que te puede interesar.

4. Fomentar la participación de los estudiantes

Es muy importante animar a los alumnos a que participen en las actividades extraescolares o en los eventos anuales que organiza el centro.

¿Te has dado cuenta alguna vez de que los alumnos que participan en estas actividades parecen tener más energía? No es casualidad.

Cuando los alumnos encuentran su sitio en los equipos deportivos, grupos de músicas o los clubes, desarrollan un sentimiento de pertenencia que ayuda a mantener a raya el absentismo.

Ya se trate de un club de lectura, un club de ajedrez o un carnaval escolar, la creación de espacios donde se forman círculos sociales ayuda a fomentar esa sensación de pertenencia al grupo que hace que los alumnos asistan al centro.

5. Refuerza lo positivo y los objetivos conseguidos

Otro aspecto importante es reforzar la asistencia y crear una entorno que celebre cualquier hito relacionado con la asistencia para mantener a los alumnos comprometidos con su asistencia a clase.

Las posibilidades son muchas y la mayoría bastante simples: van desde un simple saludo original y divertido hasta la entrega de certificados a los alumnos con una asistencia casi perfecta.

El objetivo en todo caso es transmitir al alumno que su compromiso con la asistencia es importante y se valora.

Pero no se trata sólo de asistencia, sino de progreso. No olvidemos celebrar las pequeñas victorias a lo largo del camino. Tanto si se trata de un alumno que solía tener problemas de ausencias frecuentes, pero que ahora ha mejorado, como de una clase que ha aumentado colectivamente sus índices de asistencia.

Estas celebraciones crean un efecto dominó de refuerzo positivo, inspirando a otros a esforzarse por mejorar sus hábitos de asistencia y reforzando la importancia de asistir a clase.

6. Lidera con el ejemplo

Cuando los profesores y el personal de la escuela son un ejemplo constante de puntualidad, asistencia y ética del trabajo, crean una atmósfera contagiosa para sus alumnos.

Al estar presentes y participar activamente en el proceso educativo, demuestran el valor que conceden a la asistencia y la repercusión que tiene en sus alumnos.

Esto prepara el terreno para que los alumnos sigan su ejemplo, inspirándoles sobre la importancia de acudir a clase con regularidad.

Reflexiones finales

Mediante la aplicación de las estrategias descritas en este artículo, que incluyen la creación de un ambiente de apoyo, el aprovechamiento de la tecnología o el fomento de la participación, las instituciones educativas pueden hacer frente con eficacia al absentismo de los estudiantes.

Si después de leer este artículo necesitas más información, puedes consultar nuestro artículo 9½ Técnicas para mejorar la asistencia a clase en centro escolares, donde compartimos otros consejos útiles para reducir el absentismo escolar.

Estos procedimientos no sólo ayudan a mejorar los índices de asistencia, sino que también contribuyen al compromiso, el éxito académico y el bienestar general de los estudiantes.